Las alubias blancas pequeñas forman parte de varias de mis recetas para las temporadas de otoño e invierno. Su sabor es muy suave y su textura, una vez cocidas, es mantecosa, y además, son de fácil digestión. Destacan, nutricionalmente, por su riqueza en proteína, por su alto contenido en hierro y ayudan a mantener un nivel de glucosa en sangre saludable.
Al combinarlas con arroz integral, tenemos un plato con un alto valor proteico. Y con las espinacas, ricas en vitaminas y minerales, sobre todo en hierro, le damos, además de un toque de color, un alto valor nutricional.
Preparación:
- Las alubias, al igual que todas las legumbres secas, se ponen a remojo un día antes para re-hidratarlas. Al día siguiente, en una tartera ponemos las alubias, una cebolla grande, un par de hojas de laurel, una guindilla seca (o más, según el gusto) y cubrimos con agua fría, tapamos y cuando rompe a hervir, añadimos una pizca de sal marina (al gusto) y reducimos el fuego.
- Cuando las alubias están blandas, con la ayuda de una espumadera y un tenedor, aplastamos algunas alubias para dar una textura más consistente al potaje y revolvemos.
- Añadimos una taza de café de arroz integral (el arroz integral necesita de casi una hora de cocción, por eso lo añadimos, más o menos, en medio de la cocción del potaje).
- Añadimos las espinacas, previamente escogidas y lavadas (para que estén limpias, utilizo sal marina y vinagre), cuando el potaje está cocido, pues el tiempo que necesitan es muy poco.
Ingredientes: Receta para 4 personas, en una tartera de 3 litros.
200 g de alubias blancas pequeñas secas;
170 g de espinacas (una vez escogidas y lavadas);
1 cebolla grande;
2 hojas de laurel ;
1 guindilla seca;
1 cebolla grande;
2 hojas de laurel ;
1 guindilla seca;
1 taza de café de arroz integral (marrón);
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